(ACPI) condena represión policial hacia la prensa internacional en Bolivia

Nota 

La Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional (ACPI) condena las agresiones y el uso desmedido de la fuerza por parte de la Policía hacia tres de nuestros asociados, durante la marcha de los sectores afines al expresidente boliviano Evo Morales que esta jornada llegó a la ciudad de La Paz para inscribir su candidatura en las elecciones del próximo 17 de agosto.

La primera situación se produjo en la intersección de las calles Sánchez Lima y Rosendo Gutiérrez, cuando los movilizados buscaban ingresar hasta la la plaza Abaroa, donde se sitúan las oficinas del Tribunal Supremo Electoral (TSE), pero que chocó con la respuesta de la Policía con gases lacrimógenos y otros artefactos antidisturbios. 

En esas circunstancias, un fotoperiodista y un videógrafo que trabajan para una agencia 

internacional de noticias recibieron disparos de balines de goma activados por policías desde corta distancia, a pesar de que ambos portaban sus acreditaciones, cascos y chalecos de seguridad que los identificaban como corresponsales. 

El fotoperiodista recibió el impacto de un proyectil en el pecho que fue aplacado por su equipo de seguridad, pero un segundo disparo le impactó en un brazo causándole una lesión. Mientras que el videógrafo también recibió un impacto de balín en el pecho, pero que no le causó heridas porque contaba con la indumentaria respectiva.

Otro incidente se produjo en la misma locación cuando un policía roció gas pimienta por un tiempo prolongado en el rostro del colaborador de una agencia de noticias asiática, cuando este registraba las imágenes del enfrentamiento policial con los seguidores de Morales. 

Esto dejó aturdido al reportero que quedó descompensado por varios minutos y fue auxiliado por un grupo de colegas.

Los corresponsales internacionales expresamos nuestro repudio a este tipo de situaciones que bien podrían concluir en una fatalidad o causar daños físicos irreversibles a los trabajadores de la prensa. 

También lamentamos profundamente que los miembros de la institución policial actúen sin ninguna medida, proporcionalidad y que sus actos concluyan en flagrantes agresiones a la prensa cuando los periodistas se encuentran debidamente identificados.

Exigimos al Gobierno boliviano y al Ministerio de Gobierno, del que depende la Policía Boliviana, tomar medidas inmediatas para respetar y garantizar el trabajo de la prensa, consagrados en la Constitución, además de abrir espacios para tratar este tipo de agresiones cuanto antes. 

También recordamos a las autoridades, a los actores políticos y sectores sociales que los periodistas no tomamos partido por ninguna de las partes involucradas en los conflictos.